El gobernador del estado de Illinois promulgó una nueva ley destinada a resguardar a las comunidades inmigrantes frente a posibles medidas federales más duras impulsadas por la administración de Donald Trump. La normativa busca evitar que las autoridades locales colaboren en detenciones migratorias que no cuenten con órdenes judiciales válidas, fortaleciendo así la protección de quienes residen en el estado sin importar su estatus.
La ley establece que los cuerpos policiales estatales y municipales no podrán realizar arrestos únicamente por sospechas relacionadas con estatus migratorio ni colaborar con operativos federales que no cumplan con los procedimientos legales. Según el gobernador, esta medida pretende garantizar que los inmigrantes puedan vivir sin temor a detenciones arbitrarias y fomenta la confianza entre las comunidades y las autoridades locales.
Organizaciones defensoras de derechos humanos aplaudieron la iniciativa, destacando que Illinois se posiciona como un estado que prioriza la dignidad y seguridad de las personas migrantes. Señalaron que la ley contribuirá a que más residentes se sientan seguros al denunciar delitos, acceder a servicios o participar en actividades comunitarias sin miedo a represalias.
Por su parte, algunos opositores criticaron la legislación, argumentando que podría dificultar la coordinación con autoridades federales en materia de seguridad. No obstante, el gobierno estatal reafirmó que la prioridad es proteger a los habitantes y evitar abusos derivados de políticas migratorias consideradas excesivamente agresivas.



