Grupo México, la empresa liderada por Germán Larrea y uno de los conglomerados más importantes del país, dio a conocer que venderá su división de autopistas por 7,700 millones de pesos (equivalentes a 406 millones de dólares) como parte de una estrategia de reestructuración corporativa. Los fideicomisos locales FIBRAeMX y FEXI serán los nuevos propietarios de estas vías concesionadas, una operación que se prevé quede concretada en la segunda mitad de 2025, una vez obtenidas las autorizaciones regulatorias necesarias.
En el acuerdo se incluyen aproximadamente el 80% de Concesionaria de Infraestructura del Bajío (CIBSA) y casi la totalidad de Operadora de Infraestructura del Bajío (OIBSA). La empresa informó que los recursos obtenidos se reinvertirán en nuevos proyectos dentro de México y se destinarán a fortalecer otras áreas de negocio del grupo. Como parte del proceso, CIBSA asumirá el control de OIBSA antes del cierre definitivo de la transacción.
Actualmente, Grupo México tiene bajo operación dos autopistas clave en el estado de Guanajuato: la carretera Salamanca-León, de 80 kilómetros, y el Libramiento Silao, de 17.4 kilómetros. Estas rutas no solo ofrecen servicio de peaje, sino también asistencia de emergencias 24/7 y seguros para los usuarios, cubriendo desde gastos médicos hasta daños a terceros. Solo en 2024, estos tramos generaron ingresos por mil 200 millones de pesos.
Además de la venta de su negocio carretero, el conglomerado anunció que propondrá a sus accionistas la salida de Grupo México Transportes, su filial ferroviaria, de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV). La votación para decidir sobre esta desincorporación se realizará el próximo 27 de junio, en línea con la estrategia de optimizar y reorientar sus operaciones.