La economía suiza enfrenta un panorama desafiante, con proyecciones de crecimiento a la baja debido a la potencial implementación total de los aranceles estadounidenses, según advierte el Fondo Monetario Internacional (FMI). La institución ha revisado a la baja su pronóstico de crecimiento para Suiza, situándolo en un 1.3% para el año en curso, por debajo de la estimación previa del 1.7%. Para 2026, la proyección inicial se establece en un 1.2%.
Estos ajustes reflejan la preocupación por el impacto que tendrían los aranceles del 31% que Estados Unidos podría imponer a las exportaciones suizas, incluyendo productos farmacéuticos. De concretarse este escenario adverso, las previsiones de crecimiento podrían descender significativamente a un rango de 1.1% a 1% para 2025 y entre 1.0% y 0.9% para 2026, cifras muy por debajo del promedio histórico de crecimiento del 1.8% del gobierno suizo.
Gabriel Di Bella, jefe de la delegación del FMI en Suiza, ha enfatizado la magnitud de estos riesgos, que no solo provienen de la escalada arancelaria sino también de la incertidumbre política global. La imposición de estas tarifas podría perjudicar severamente el comercio con el principal mercado de exportación de Suiza. Voces de la propia economía suiza, como la del miembro de la junta directiva del Banco Nacional Suizo (SNB), Attilio Zanetti, han coincidido con las advertencias del FMI, señalando un costo considerable para la economía mundial debido al aumento de las barreras comerciales. Este entorno de creciente proteccionismo comercial representa un desafío crítico para la estabilidad económica global y, en particular, para una economía tan abierta y dependiente de las exportaciones como la suiza.