Alsea anunció su nueva política global: por cada tienda nueva que inaugura, remodelará dos unidades ya operativas. Este enfoque revela un giro en su estrategia de crecimiento, orientado hacia la excelencia operativa y la experiencia del cliente en lugar de una expansión cuantitativa indiscriminada .
Según el nuevo director general, Christian Gurría, la remodelación representa solo entre el 15 % y 20 % del costo de una apertura, pero puede producir mejoras visibles en el flujo de clientes, con incrementos de tráfico superiores al 8 % en establecimientos ya establecidos . Si Alsea mantiene su ritmo proyectado —entre 200 y 220 nuevas tiendas por año—, implicaría cerca de 400 remodelaciones anuales, una cifra que supera prácticas anteriores .El modelo responde a un plan más integral de asignación disciplinada de capital que busca calidad en ubicaciones clave, marcas rentables y una optimización del portafolio. La apertura se mantiene, pero como complemento de una robusta estrategia de renovación y modernización .
Este viraje estratégico llega en un contexto donde Alsea concentra cerca del 74 % de sus inversiones de capital en inauguraciones, remodelaciones y mantenimiento, mientras el resto se canaliza a tecnología, digitalización y mejora de procesos .
Pese a lo positivo en términos de eficiencia y ROI, surgen interrogantes sobre el impacto real para marcas con bajo desempeño o escaso potencial de recuperación. La clave, en adelante, será hacer rendir las remodelaciones en unidades con capacidad de retorno, sin caer en esfuerzos desequilibrados.
En resumen, Alsea apuesta por una expansión más mesurada y una experiencia mejorada, pero el éxito dependerá de que las remodelaciones generen el tráfico y la rentabilidad esperada, y no queden como una inversión estética sin sustento financiero.
Alsea remodelará dos unidades por cada apertura nueva
