Los Pistons atraviesan su mejor momento en más de quince años. Con un plantel mermado por lesiones, Detroit dominó desde el primer cuarto gracias a un Jalen Duren imparable que sumó 31 puntos en su regreso. Daniss Jenkins añadió 26, y el aporte colectivo permitió sostener el ritmo durante todo el encuentro.
Indiana, por su parte, vive un derrumbe preocupante. Con récord de 1-13 y ocho derrotas consecutivas, los Pacers volvieron a mostrar una defensa frágil y una desconexión evidente en los momentos clave. Pascal Siakam y Benedict Mathurin aportaron puntos, pero el equipo nunca pudo reducir diferencias de manera consistente.
Detroit tomó el control definitivo tras una racha de triples de Duncan Robinson, y aunque Indiana mejoró en la segunda mitad, el daño estaba hecho. Los Pistons se convierten así en el primer equipo del Este en llegar a 12 victorias y mantienen una racha que no vivían desde la temporada 2007-08.
Mientras Detroit se proyecta como una sorpresa competitiva, los Pacers enfrentan preguntas profundas sobre dirección técnica, rotaciones y futuro inmediato.







