BHP Group, la minera más grande del mundo, ha anunciado oficialmente que abandona su multimillonaria oferta de adquisición sobre su rival británica Anglo American. La decisión se produce después de que BHP no lograra obtener el apoyo necesario de la junta de Anglo American y de que expirara su plazo de negociación. BHP concluyó que una Oferta Pública de Adquisición (OPA) hostil y prolongada no serviría a los intereses de sus accionistas.
El principal argumento de la dirección de BHP para justificar la retirada es que su plan de crecimiento interno (orgánico) es «más convincente». El enfoque se centrará ahora en maximizar el valor de sus activos clave, especialmente en el segmento del cobre y el hierro, los cuales son esenciales para la transición energética global. BHP busca asegurar su posición como líder en la minería de minerales críticos sin incurrir en los enormes costos y riesgos asociados a una adquisición de la escala de Anglo American.
Desde una perspectiva crítica, la retirada alivia la presión financiera que habría supuesto la compra. La oferta de BHP estaba condicionada a la escisión de los activos de platino y hierro de Anglo en Sudáfrica, una complejidad regulatoria y política que representaba un riesgo significativo de ejecución.
La decisión de BHP ha sido recibida con cautela. Si bien evita una costosa batalla, la minera debe ahora demostrar que su estrategia interna puede generar el mismo nivel de crecimiento y eficiencia operativa que prometía la adquisición. Anglo American, por su parte, enfrenta la presión de implementar su propio plan de reestructuración de activos para mantener su valoración de mercado y la confianza de los inversores.



