Ubicado a 2,100 metros sobre el nivel del mar en El Valle del Tunal, Viñedos Don Leo se erige como un testimonio vibrante de la fusión entre arte, historia y la esencia familiar impregnada en la uva. Fundado por Don Leo Mendel, un judío alemán que encontró su hogar en México en 1938, este rincón vitivinícola lleva consigo la herencia de valores arraigados en la tierra y la pasión por el campo.
Arturo Mendel, hijo de Don Leo, asumió el liderazgo de esta visión única. En el año 2000, nació la ambición de transformar un vino regional prestigioso, dando vida a Viñedos Don Leo, un sentido homenaje a la memoria de su progenitor.
En la actualidad, la combinación de la nueva tecnología alemana y la artesanía tradicional ha garantizado la perpetuidad de la legendaria calidad y estilo de los vinos de Don Leo.
Impulsado por la innovación, el compromiso con la producción orgánica se refleja en el cuidado dedicado a las plantas, mientras que las barricas de roble francés y americano añaden matices únicos a cada creación. El toque distintivo de su enólogo, Francisco Rodríguez González, reconocido internacionalmente como el más galardonado de México, completa el proceso de creación.
La primera plantación en el 2000 incluyó variedades como Cabernet Sauvignon, Merlot y Chardonnay. En la actualidad, las cepas cultivadas se extienden a Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc, Shiraz, Merlot, Malbec, Zinfandel, Pinot Noir, Sauvignon Blanc, Chardonnay, Semillón, Gewurztraminer, entre otras.
Don Leo rinde homenaje a sus raíces judías con su etiqueta Kosher Cabernet Sauvignon, que obtiene esta certificación después de haberse producido bajo estricta supervisión de la religión ortodoxa, siendo así uno de los pocos vinos mexicanos con esta certificación.
El punto culminante llegó en el 2020 cuando el Don Leo Gran Reserva Cabernet Sauvignon 2013 fue coronado como el Mejor Cabernet Sauvignon del Mundo en el Concours International des Cabernets. El sommelier mundialmente aclamado, Laurent Derhé, elogió sus características complejas y su estructura distintiva.
Visitar el viñedo es una experiencia en sí misma, una oportunidad para sumergirse en la rica historia y tradición de Don Leo. La conexión con la naturaleza y la apreciación de las maravillas que ofrece, especialmente durante la primavera, hacen de este destino un lugar imperdible. Cada estación del año revela diferentes perspectivas del ciclo de la vida, resaltando la importancia continua para el crecimiento y desarrollo de la uva.
El punto álgido del año llega con la Vendimia Don Leo, celebrada cada primer fin de semana de septiembre. Este evento especial ofrece degustaciones, espectáculos, pisada de uvas, talleres de catas, un show ecuestre y música en vivo, llevando a los visitantes a una experiencia inolvidable en la historia y la excelencia vitivinícola de Viñedos Don Leo.
Con información de Expansión | Nota original
