Gesche Joost, la nueva presidenta del Goethe-Institut, se encuentra en su primera visita fuera de Europa a la sede de México, para compartir su visión sobre la institución y la relevancia de la cultura en la actualidad. Fundado en 1951, el Goethe-Institut ha sido un pilar clave para el fortalecimiento de lazos diplomáticos y culturales, con presencia en 98 países. En su conversación con El Economista, Joost expresó su admiración por la manera en que México asimila y preserva su cultura, especialmente las culturas originarias y su historia de descolonialismo.
Joost enfatizó que el objetivo del Goethe no es imponer la cultura alemana, sino crear una cultura compartida con sus socios locales. Destacó su visita al Museo Nacional de Antropología, donde pudo ver de primera mano cómo se trabaja directamente con las comunidades, lo que, según ella, refleja la rica herencia cultural de México. Este enfoque de co-creación cultural es una característica central en todas las sedes del Goethe-Institut.
En cuanto a los desafíos de la cultura contemporánea, Joost reflexionó sobre la fragmentación del público y la diversidad de experiencias culturales. Mientras que las culturas de nicho tienen su valor, el Goethe-Institut busca trascender esas fronteras ofreciendo experiencias tanto individuales como masivas, con el fin de generar un sentido de comunidad. Para ello, han organizado eventos de gran alcance como festivales de cine y techno, y han apostado por expandir su presencia más allá de la Ciudad de México para incluir a otras entidades del país.
Joost también habló sobre la importancia de medir el impacto de sus programas, mencionando los 17,000 exámenes de certificación de alemán que se realizan anualmente en el Goethe-Institut de México como un ejemplo de la relación entre lengua y cultura. Además, destacó su enfoque de salir de las sedes para generar redes y trabajar directamente con las comunidades, como lo demuestra su visita al Barco Utopía en Iztapalapa, un proyecto que promueve la comunidad a través de la cultura.
Este enfoque inclusivo y accesible refleja la misión del Goethe-Institut: acercar la cultura a todos, sin distinción de clases, y demostrar que las iniciativas culturales pueden y deben ser para todos.