El mundo entero reaccionó con consternación tras el accidente del vuelo de Air India con destino a Londres que se estrelló poco después de despegar de Ahmedabad, en el oeste de India. El avión, un Boeing 787 Dreamliner, transportaba a 242 personas. Las autoridades han confirmado múltiples fallecimientos, aunque aún no se ha proporcionado un número oficial de víctimas.
El primer ministro indio, Narendra Modi, expresó su profundo pesar en redes sociales, calificando la tragedia como “desgarradora” y asegurando que su gobierno está movilizado para brindar apoyo a las víctimas y sus familias. Desde el Reino Unido, el primer ministro Keir Starmer también manifestó su pesar, destacando que entre los pasajeros había ciudadanos británicos.
El impacto del siniestro trascendió fronteras, con mensajes de solidaridad por parte de diversos líderes. El rey Carlos III de Reino Unido, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente francés Emmanuel Macron enviaron sus condolencias al pueblo indio y a los familiares de los fallecidos. El presidente ruso Vladimir Putin hizo lo propio a través de un telegrama dirigido a Modi, mientras que el asesor principal de Bangladesh, Muhammad Yunus, ofreció asistencia a India.
Otros jefes de Estado y de gobierno, como los de Australia, Irlanda y la Unión Europea, coincidieron en destacar la gravedad del hecho y en ofrecer apoyo en este difícil momento. Mientras se desarrollan las investigaciones para esclarecer las causas del accidente, el mundo permanece atento y unido en solidaridad con las víctimas y sus seres queridos.