Israel anunció este viernes el inicio de un alto al fuego en la Franja de Gaza, tras alcanzar un acuerdo con Hamás que pone fin, al menos temporalmente, a dos años de intensos enfrentamientos. El pacto, mediado por Egipto, Catar, Turquía y con apoyo del expresidente estadounidense Donald Trump, contempla en su primera fase la liberación de rehenes israelíes en un plazo de 72 horas.
El cese de hostilidades ha provocado el regreso masivo de desplazados palestinos a sus hogares, muchos de ellos completamente destruidos. Según la Defensa Civil gazatí, al menos 200,000 personas regresaron este viernes al norte del enclave. Mientras tanto, rescatistas comenzaron a recuperar cuerpos entre los escombros, hallando 63 cadáveres en las calles de Ciudad de Gaza.
El ejército israelí anunció su repliegue hacia “líneas de seguridad”, mientras Netanyahu expresó esperanza de que el lunes se convierta en un “día de alegría nacional” con el regreso de los rehenes. De los 48 cautivos que quedan, 20 están vivos y 28 han muerto, según el gobierno israelí.
Como parte del acuerdo, Israel deberá liberar a 250 presos por razones de seguridad y 1,700 palestinos arrestados desde octubre de 2023. No obstante, el pacto deja aún cuestiones sin resolver, como el futuro político de Gaza y el desarme de Hamás. La propuesta de una autoridad de transición impulsada por Trump ha sido rechazada por el liderazgo del movimiento islamista. Mientras tanto, la población palestina espera que esta tregua sea el primer paso hacia el fin definitivo del conflicto.