El problema radica en pensar que uno es el centro del mundo, y no querer convivir con el resto del mundo…
Macraf
Para nadie es secreto que al morador de palacio no le gusta en lo más mínimo el tema internacional, sobre todo si es algo que juega en su contra, a menos claro que se trate de apoyar y ayudar a sus finísimos amigos, Maduro, Díaz Canel, Ortega entre otros, pero, aun cuando esa ha sido su postura desde hace 5 años y 4 meses, la economía mundial es un escenario en constante movimiento, y nuestro país no es ajeno a este dinamismo. La más reciente actualización del ranking de las diez mayores economías del mundo ofrece una perspectiva sobre el lugar que México ocupa en el contexto global. ¿cuál es la herencia que la actual administración, encabezada por el hijo predilecto de Macuspana, dejará a la próxima presidenta de México en el tema económico internacional?
En el escenario actual, Estados Unidos y China mantienen una sólida posición como las principales potencias económicas del mundo, con un PIB de 28 billones de dólares y 19 billones de dólares, respectivamente. No obstante, los cambios comienzan a manifestarse a partir del tercer lugar en la tabla. Alemania ha desplazado a Japón como la tercera economía del mundo, mientras que Brasil ha ingresado al exclusivo grupo de las diez principales economías, desplazando a Rusia de la lista.
El caso de Brasil es especialmente relevante. Con un PIB de 2,17 billones de dólares y un crecimiento del 2,9% el año pasado, ha demostrado un camino hacia el éxito económico que México podría seguir. Este éxito se ha atribuido en gran medida al impulso del sector agrícola, que registró un crecimiento récord del 15,1% en su contribución al PIB.
En contraste, México se encuentra en la decimotercera posición en el ranking económico mundial. Si bien el país ha mantenido una posición relativamente estable, la pregunta inevitable es si está preparado para ascender en esta clasificación y qué medidas se deben tomar para lograrlo.
De acuerdo con el director general de BBVA México, el país tiene una oportunidad única para escalar en el ranking económico mundial. Sin embargo, esto requerirá un esfuerzo concertado para aumentar la inversión, tanto pública como privada. México necesita alcanzar cuando menos un 25% del PIB en inversión para impulsar un crecimiento sostenido, situación que solo sería posible si se realizan una serie de medidas clave para estimular el crecimiento económico. Esto incluye el impulso a las energías renovables, la mejora en la gestión del agua y la promoción de proyectos de infraestructura, como carreteras y puertos. Además, se identifican áreas de oportunidad para abordar desafíos estructurales, como la informalidad laboral, el uso excesivo de efectivo y la mejora en la educación y el capital humano.
Lamentablemente, lo anterior es poco probable que se realice en el corto plazo si se continúa por el camino marcado por el gobierno del tabasqueño, ya que la candidata oficialista ha prometido continuidad en el proyecto del morador de palacio, lo que va totalmente en contra de lo que se requiere para hacer crecer al país, además, nuestro país enfrenta obstáculos significativos, como la competencia global, la inestabilidad política y los desequilibrios económicos internos.
La próxima administración deberá centrar su energía en temas como la seguridad y el Estado de Derecho, que son fundamentales para crear un entorno propicio para la inversión y el desarrollo económico, variables necesarias para mejorar la posición del país en el entorno internacional, ojalá que las candidatas lo tengan claro, de no ser así, mucho me temo que no solo perderemos relevancia a nivel internacional, sino que la calidad de vida de los mexicanos sufrirá un gran descalabro.
