
Eduardo López Chávez
Economista y consultor experto en economía, política y administración pública, fundador de El Comentario del Día.
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Cuando la lealtad pesa más que la capacidad, el barco se hunde, pero eso sí, con aplausos…
Macraf
La frivolidad y la incompetencia quedaron resumidas a la perfección en una frase de la corcholata mayor durante su show cómico-mágico-musical: “Ayer vi que ‘narcopresidente AMLO’, ya déjenlo en paz. Todo otra vez contra el presidente López Obrador…”, pero en el mismo discurso dijo: “Ya se les olvidó García Luna, ya se les olvidó la guerra contra el narco, ya se les olvidó Felipe Calderón…”. ¿Acaso solo ellos tienen el monopolio de culpar a los gobiernos del pasado? Claudia, eres una copia exacta del nuevo morador de Palenque: frívola e incompetente.
El hijo predilecto de Macuspana pasó todo su mandato culpando a Calderón y al neoliberalismo, pero jamás mencionó al gobierno inmediato anterior, el de Peña Nieto. Cuando lo hizo, fue con guantes de seda: “EL Licenciado Peña”. Ahora, tú sigues el mismo libreto: evitas criticar al sexenio que te precedió y, cuando lo mencionas, es “EL Presidente López Obrador”. Pero, lamentablemente para ti y tus huestes, hay quienes sí tenemos memoria de todos y cada uno de los sexenios pasados, y sobre todo, tenemos el derecho de señalar los grandes errores que parecen haber sido convenientemente borrados de tu narrativa. Y aquí es donde entra la economía.
No se puede entender la situación económica actual sin mencionar la gran cantidad de caprichos del nuevo morador de Palenque. Sus obras faraónicas nos costaron miles de millones de pesos y hoy son un lastre. Una refinería que no refina, un aeropuerto infuncional, un tren contaminante y destructor del entorno natural, entre otros despropósitos. Claudia, ¿ya se te olvidó cuando Andrés decidió cancelar el NAICM? ¿También olvidaste que esa decisión provocó que, incluso antes de la pandemia, la economía no solo no creciera, sino que se contrajera? No, Claudia, no podemos dejar en paz a Andrés, porque el mandato de las urnas que tanto presumen fue claro: las cosas debían cambiar. Pero él defraudó a quienes le dieron su confianza.
Su gran eslogan “por el bien de todos, primero los pobres…” se transformó en “por el bien del movimiento y el mío, los pobres deben mantenerse pobres…”. Basta ver lo que se hizo con la educación y el deplorable estado en el que dejó el sistema de salud. No, no es como el de Dinamarca, por más que lo repitan. Y, por si fuera poco, tanto la pseudoemperatriz como sus huestes defienden a ultranza que todo está “requeté bien”. Pero los datos, esos que no son los otros datos de Andrés, los están cacheteando con realidad.
Cuando el tabasqueño dijo que no habría más deuda, mintió. Y la corcholata mayor lo minimiza, pero los datos oficiales son contundentes: la deuda pública de México se colocó en un 51.7% del PIB al cierre de 2024, cinco puntos más que en 2023. No solo eso, es el nivel más alto desde 1990, en tiempos de Salinas. ¿A él sí lo recuerdas, Claudia? Por supuesto que sí, después de todo, fue uno de los modelos a seguir del propio Andrés, a quien idolatras con fervor.
La deuda del país, según la SHCP, pasó de 14.864 billones de pesos en 2023 a 17.551 billones en 2024, un aumento de 2.686 billones en solo un año. Y esto no es culpa de Calderón, Fox o el neoliberalismo: sucedió durante la gestión del tlatoani Macuspano. Pero aquí no termina la historia. La Auditoría Superior de la Federación (ASF) reveló que en la Cuenta Pública de 2023 hay, al menos, 51,765 millones de pesos de recursos federales usados de manera irregular. Hasta la fecha, no han sido aclarados, justificados o devueltos.
Finalmente, como dice la sabiduría popular, no hay peor ciego que el que no quiere ver. No tenemos una economía súper fuerte y boyante. Según el INEGI, la economía se estancó en los primeros meses del año, con crecimientos marginales de 0.1% en enero y 0.2% en febrero. Y en comparación anual, en febrero de 2025, la economía cayó 0.7%.
Entonces, Claudia, ¿dejamos en paz al tabasqueño y tú asumes toda la culpa? ¿O cuál es el plan?
Así, así los tiempos estelares del segundo piso de la transformación de cuarta.