La Comisión Europea ha propuesto imponer una tarifa de 2 euros por cada paquete de bajo valor (menos de 150 euros) que ingrese directamente a consumidores en la Unión Europea, medida que impactaría especialmente a plataformas de comercio electrónico como Temu y Shein. El objetivo es compensar el trabajo de las agencias aduaneras y fomentar el uso de almacenes dentro del bloque.
Según el comisario de Comercio, Maros Sefcovic, los paquetes enviados a almacenes en la UE enfrentarían una tarifa menor de 0,50 euros. Esta diferencia busca incentivar a las plataformas a establecer centros de distribución en Europa, facilitando el control de seguridad de los productos e intentando reducir la competencia desleal que enfrentan los productores europeos.
En 2024, la UE importó 4.600 millones de paquetes de bajo valor, el 91% provenientes de China. Bruselas teme que muchos de estos productos sean inseguros o falsificados, y que las plataformas no hagan lo suficiente para impedir su venta. Además, la medida busca abordar problemas medioambientales derivados del aumento de productos de baja calidad.
La propuesta forma parte de una reforma más amplia para crear una Autoridad Aduanera única y un sistema informático unificado en la UE. La iniciativa aún debe ser aprobada por los 27 países miembros.
Mientras tanto, el banco central estadounidense mantiene el enfoque en su doble mandato de estabilidad de precios y pleno empleo, analizando cuidadosamente cómo la degradación crediticia puede modificar sus perspectivas de política monetaria.