El mieloma múltiple, un cáncer que ataca la médula ósea y corroe los huesos, ha sido históricamente una sentencia de muerte para quienes lo padecen. A pesar de los avances en el tratamiento que han prolongado la supervivencia media, una cura había parecido inalcanzable. Sin embargo, un reciente estudio ha encendido una luz de esperanza. Pacientes con mieloma múltiple avanzado, que habían agotado todas las opciones de tratamiento y se encontraban en cuidados paliativos, han respondido de manera sorprendente a una inmunoterapia experimental.
Los resultados de este estudio, presentados en la conferencia anual de la Sociedad Americana de Oncología Clínica y publicados en The Journal of Clinical Oncology, revelan que un tercio de los pacientes tratados con la inmunoterapia CAR-T, desarrollada por Legend Biotech y bajo licencia exclusiva de Johnson & Johnson, han logrado lo que parece ser una remisión completa y duradera de su cáncer. Tras cinco años, la enfermedad no ha reaparecido en estos pacientes, un hito sin precedentes para esta enfermedad.
Esta notable respuesta ha llevado a reconocidos oncólogos a considerar seriamente la posibilidad de una «cura potencial», algo impensable para el mieloma en los últimos 30 años. La terapia CAR-T consiste en modificar los propios glóbulos blancos del paciente para que ataquen las células cancerosas. Aunque el proceso es complejo y puede generar efectos secundarios graves, el éxito en el mieloma múltiple ha desafiado las expectativas y ha generado un optimismo considerable dentro de la comunidad médica.
Aunque el tratamiento CAR-T tiene un costo elevado, la esperanza es que su aplicación temprana en el curso de la enfermedad pueda conducir a curaciones en una fase inicial. Johnson & Johnson ya está investigando esta posibilidad. Expertos en mieloma, como Kenneth Anderson del Instituto Oncológico Dana-Farber, sugieren que si esta inmunoterapia se utiliza como tratamiento de primera línea, la curación podría convertirse en una expectativa realista. Para pacientes como Anne Stovell, quien ha vivido seis años sin rastro de cáncer después del tratamiento, estos resultados son un alivio inmenso y una prueba palpable de que la esperanza ha llegado al horizonte de la cura del mieloma múltiple.
