8 de julio de 2025 8:10 am
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OPINIÓN

Estado de Bienestar (3/3) | Coyuntura económica y algo más

…en la práctica uno no excluye al otro, es decir, una persona podría caber en ambos modelos, recibir un beneficio por su ocupación y el que el gobierno garantiza por ser ciudadano y cumplir con los requisitos, así mismo, recordemos que la idea general del estado de bienestar es…

Estado de Bienestar (3/3)

No por que a algo le funcione a alguien más, significa que a uno le puede funcionar, hay que entender el contexto propio…

Macraf

En 1994, nuestro país entro en un proceso económico que modificó completamente la dinámica política y social que se vivía hasta ese momento, la entrada en vigor del entonces TLCAN, puso a México en el mapa del comercio internacional y no solo como un país más, sino como uno de gran relevancia por formar parte del bloque más fuerte a nivel internacional, América el norte.

Este hecho provocó que al interior del país se diera un cambio sustancial en la forma de hacer política y, de concebir el bienestar y desarrollo de la población, en términos económicos, pasamos de tener un gobierno que participaba en el proceso económico, a uno que solo debía regular la actividad económica, lo que volvió necesario que las empresas propiedad del estado se privatizaran y solo quedaran en control gubernamental, las relacionadas con el sector energético y petrolero, ambos considerados sectores estratégicos, estas acciones fueron el inicio del proceso de modernización del quehacer económico.

En términos políticos y sociales, las cosas también cambiaron, el discurso ya no solo hablaba de cómo eliminar las desigualdades y erradicar la pobreza, sino de crear oportunidades, dar educación para las futuras generaciones e incluso, la posibilidad de tener un país que fuera potencia mundial, pero, a la par, se le daba mayor impulso a los grandes programas sociales que, por supuesto, no desaparecieron, pero a diferencia de lo que fue la reforma agraria que utilizaba la repartición de tierras como eje fundamental del desarrollo económico de las personas, ahora aparecía un modelo que buscaba la “justicia social”, Solidaridad, programa que en principio, se enfocaba en la generación de infraestructura en zonas de bajos recursos: escuelas, electricidad, hospitales, pavimentación, entre otros, y que, en gobiernos posteriores, continuó con otros nombres, pero con la misma finalidad, hasta la llegada al poder del Hijo predilecto de Macuspana, quien decidió desaparecerlo y crear una política social, centrada en la transferencia directa de recursos.

Dado lo anterior, considerando los tres tipos de estado de bienestar: liberal, socialdemócrata y conservador, y, en respuesta a la pregunta, ¿es posible establecer un modelo de estado de bienestar en México?, la respuesta es no, el motivo es que, nuestro país funciona en términos sociales como una mezcla de los tres tipos de estados de bienestar y posee, una gran deficiencia en términos tributarios debido al bajo nivel que representa la base tributaria, esto es, quienes pagan impuestos, en comparación con quienes no lo hacen, ya sea por desempleo o por estar en el sector informal de la economía.

Sobre los derechos sociales, en México hay dos modelos muy marcados, el contributivo, todas aquellas personas que gozan de seguridad social por las aportaciones derivadas de su actividad profesional u ocupación (estado de bienestar conservador) y el no contributivo, aquellas personas que por el simple hecho de ser ciudadanos y cumplir con ciertos requisitos, que dicho sea de paso, están estipulados en diversas leyes, acceden a beneficios sociales como pensiones (estado de bienestar socialdemócrata), sin embargo, en la práctica uno no excluye al otro, es decir, una persona podría caber en ambos modelos, recibir un beneficio por su ocupación y el que el gobierno garantiza por ser ciudadano y cumplir con los requisitos, así mismo, recordemos que la idea general del estado de bienestar es que, prácticamente todas las personas, tengan acceso a servicios públicos que les permitan mejorar su calidad de vida, por lo tanto, no solo se debe hablar del ingreso, en el caso mexicano, todas las personas tienen acceso a todos los servicios públicos, pero, la calidad y disponibilidad de estos, es lo que influye en su uso, por ejemplo, en el caso del servicio de agua o alumbrado público, solo están disponibles a través del Estado, pero, en el caso de transporte, educación, salud, o incluso seguridad, si hay opciones distintas al Estado, pero no todos tienes acceso a esos bienes por temas de ingreso.

Por lo tanto, la calidad de los servicios se vuelve el factor de riesgo que se debe compartir a nivel social, entonces, ¿estaría dispuesta la sociedad en conjunto a compartir ese riesgo?, algo poco probable dado que, ambos lados, los que más tienen y los que menos tienen, tendrían que estar dispuestos a perder algo en el corto plazo, desafortunadamente en este país, esa inmediatez pesa más que la visión de largo plazo, tanto a nivel social como a nivel político, este último de forma más importante porque, suele utilizar los programas sociales como moneda de cambio, algo que sobre todo en el actual gobierno ha quedado claro.

El estado de bienestar es una meta deseable por cualquier país, pero, mientras la propia sociedad no acepte lo que conlleva y el gobierno siga manteniendo las políticas públicas politizadas, es una meta inalcanzable, en el caso mexicano, me atrevería a decir que por momentos, imposible, pero, también es cierto que no necesariamente el estado de bienestar es la mejor forma de gobierno.

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