23 de diciembre de 2024 1:30 am
OPINIÓN

El 2022 ya “se está cocinando”

En la gran mayoría de los Estados, las precampañas comienzan en diciembre y terminan en enero o febrero. Hablando de Durango, el “merequetengue” político para la gubernatura comenzará pocos días antes de que termine el mes de los difuntos...

ESCUCHAR EL AUDIO
Rodrigo Saval Pasquel

Si creyeron que ya se habían librado de la parafernalia electoral en 2021, lamento decirles que no es así, ya que electoralmente hablando, el 2022 ya “se está cocinando”. Aunque muchas veces no nos enteramos, o más bien nos preocupamos únicamente por las elecciones federales, y en el caso de las elecciones locales, nos interesan específicamente las que se celebran en nuestra entidad, en México cada Estado decide cuando celebrarán los comicios para elegir a sus gobernantes estatales y municipales.

El siguiente año, las y los ciudadanos de Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas, tendrán la oportunidad de ejercer sus derechos y emitirán su voto para seleccionar a las diferentes autoridades que los y las gobernarán por los siguientes 6, y en algunos casos, 3 años.

En todas las entidades mencionadas se elige a un nuevo gobernador o gobernadora. Sin embargo, en el caso específico de Durango, se renuevan 39 presidencias municipales, 39 sindicaturas y 327 regidurías. Quintana Roo también escoge a sus representantes ante el Congreso Local, ya que se disputan 15 diputaciones por Mayoría Relativa y 10 por Representación Proporcional.

En la gran mayoría de los Estados, las precampañas comienzan en diciembre y terminan en enero o febrero. Hablando de Durango, el “merequetengue” político para la gubernatura comenzará pocos días antes de que termine el mes de los difuntos. En todos los casos, el 3 de abril se da el banderazo oficial para comenzar las campañas culminando en una enorme fiesta electoral el 1 de junio.

Como ya mencioné anteriormente en mi columna “Los Tapaditos”, en el caso de los guindas, la figura de las y los “superdelegados” nos permite anticipar quienes podrían ser las y los candidatos del régimen. Y aunque las y los coordinadores estatales de programas sociales siguen “vivitos y coleando”, en varios casos, como lo es en Durango, Hidalgo, Oaxaca y Tamaulipas, hay integrantes de la Cámara Alta que “suenan demasiado”, por lo que de manera interna, los Morenistas aparentemente siguen “midiéndole el agua a los camotes”.

Sobre la autodenominada oposición, en muchas de estas entidades se rumora que la alianza del “chile, mole y pozole”, todavía no acaba de “cuajar” por grillas sobre qué partido postulará a él o la candidata. Pero en el Estado de Oaxaca dicen que ya desde el 1 de noviembre le pusieron una tradicional ofrenda de día de muertos a la posible gubernatura de Francisco Ángel Villarreal.

Porque aunque es muy probable que se dé una coalición encabezada por él, es casi seguro que nacerá muerta por la cercanía que el actual gobernador priísta y su padre tienen con el Gobierno Federal. Ya que como nos ha dado a entender el Presidente, los Murat son “su mero mole”, haciendo evidente que en la tierra de Juárez “ese arroz ya se coció”.

Y aunque para muchos pueda pasar desapercibido, hay que entender que encontrándonos en el mes del cempasúchil, no es coincidencia que el color naranja se comience a asomar en todos los rincones del país. Ya que a pesar de que en algunos lados todavía no se encuentran listos para cosechar sus frutos, no hay duda de que los árboles de naranjas ya fueron plantados y crecen a ritmo acelerado.

Todavía no han quedado claro los “movimientos” sobre quiénes serán los “gallos” o las “gallinas” que pondrán los huevos, salvo en el caso del “establo” donde la Vaca probablemente no llegará a Cabeza de “ganado”. Ahí, en Tamaulipas, ha quedado muy claro que un candidato naranja a gobernador cuenta por “Diez”. 

Sobre los resultados, el 2021 nos enseñó que todo puede suceder, por lo que conceder sería un error. Sin embargo, hoy las encuestas dicen que al menos 5 gubernaturas serán ganadas por obradoristas, menos en Aguascalientes, donde todo apunta a que el agua seguirá siendo azul. En cuanto a presidencias municipales y Congreso, los sabores y colores pueden variar según su Estado natural.

Compartir en:

Twitter
Facebook
LinkedIn
Telegram
WhatsApp
Email

Más Columnas de opinión

Noticias de interés

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *