Momentos de tensión y alarma se vivieron durante el partido entre los Pittsburgh Pirates y los Chicago Cubs, cuando un aficionado cayó desde las gradas al campo de juego en el estadio PNC Park. El incidente ocurrió en la séptima entrada, justo después de que Andrew McCutchen conectara un doble de dos carreras que puso a los Piratas al frente 4-3.
El hombre, cuya identidad no ha sido revelada, cayó desde una altura estimada de seis metros, impactando en el jardín derecho y quedando inmóvil tras el golpe. Inmediatamente, los jardineros de ambos equipos corrieron a auxiliarlo y se llamó al personal médico. Durante aproximadamente cinco minutos, entrenadores y personal de seguridad trabajaron para estabilizarlo antes de retirarlo del terreno en un carrito.
Los entrenadores Derek Shelton, de los Piratas, y Craig Counsell, de los Cubs, alertaron rápidamente a los umpires para detener el juego y dar prioridad a la atención médica del aficionado. “A pesar de estar lejos, vimos cómo cayó y que quedó inmóvil. Fue impactante”, expresó Shelton. La escena generó gran preocupación entre los jugadores, quienes se unieron en oración mientras se brindaba la atención de emergencia.
A través de un comunicado, los Piratas de Pittsburgh confirmaron que el aficionado fue trasladado al Hospital General de Allegheny, sin ofrecer más detalles sobre su condición médica. El encuentro se reanudó brevemente y terminó con una victoria 4-3 para los Piratas, sin que se jugara la novena entrada de los Cubs. El hecho dejó una fuerte impresión tanto en el público como en los jugadores, quienes describieron el momento como uno de los más angustiantes vividos en un campo de béisbol.