7 de julio de 2025 11:53 pm
Cerrar / Abrir
OPINIÓN

De Economía y otras cosas

Lo que pretende AMLO es hacer legal lo que, según las leyes, es ilegal, y hacer constitucional lo que, según la Constitución, es inconstitucional, como lo es su contrarreforma eléctrica...

ESCUCHAR EL AUDIO
Arturo Damm Arnal

Peligroso para los derechos de los ciudadanos el camino que está tomando AMLO.

Así lo apuntó en Twitter @veronicaortizo:

Lo que pretende AMLO es hacer legal lo que, según las leyes, es ilegal, y hacer constitucional lo que, según la Constitución, es inconstitucional, como lo es su contrarreforma eléctrica, que viola el artículo 4, que habla del derecho al medio ambiente sano; el artículo 25, que habla del desarrollo sustentable; el artículo 28, que habla de la competencia en la generación de electricidad; el 133, que habla del respeto a los tratados internacionales. La contrarreforma eléctrica de AMLO va contra el medio ambiente sano, el desarrollo sustentable, la competencia en la generación de electricidad, el T-MEC, el Tratado México, Estados Unidos Canadá, que sustituyó el TLCAN, el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.

En su toma de posesión AMLO juró respetar y hacer respetar la Constitución por lo que pretender cambiarla, por capricho, no por una razón válida, implica violar ese juramento, algo que los ciudadanos debemos reclamarle.

Me queda claro que hay ocasiones en las que, por razones válidas, no por caprichos presidenciales, deberá cambiarse la Constitución, lo cual me lleva a esta pregunta: de las 745 reformas constitucionales que han tenido lugar entre 1917 y 2020, ¿cuántas fueron por razones válidas y cuántas por caprichos presidenciales?, lo cual me lleva a esta otra: ¿qué es una razón válida cuando de cambiar la Constitución se trata? Esta es la pregunta más importante, cuya respuesta no encontramos dónde deberíamos encontrarla, en la misma Constitución.

En el artículo 135 de la Constitución se reconoce que la misma puede ser modificada, adicionada o reformada, y se señalan cuáles son las condiciones para que pueda serlo: “Se requiere que el Congreso de la Unión, por el voto de las dos terceras partes de los individuos presentes, acuerden las reformas o adiciones, y que éstas sean aprobadas por la mayoría de las legislaturas de los Estados y de la Ciudad de México”.

En la Constitución deberían establecerse las razones válidas para su modificación, ya sea por medio de reformas, ya sea a través de adiciones, para evitar que las mismas se hagan en función de los caprichos de quien las proponga, modificaciones que pueden ir en contra del medio ambiente sano, del desarrollo sustentable, de la competencia, y de los tratados internacionales, todo lo cual, de aprobarse las modificaciones, resultaría constitucional. Sí, constitucional pero injusto. Y si lo injusto es constitucional, lo que se tiene es Estado de chueco, no de Derecho.

Para que en la Constitución se establezcan las razones válidas para sus modificaciones, es necesario responder a la pregunta por el fin de las constituciones, fin que puede ir, desde el respeto constitucional a los derechos de los ciudadanos (correcto), hasta la validación constitucional de los caprichos de quienes detentan el poder político (incorrecto), que es el poder para obligar, prohibir y castigar, poder que debe estar perfectamente delimitado, siendo esta delimitación la tarea esencial de las constituciones, algo que AMLO no reconoce. Su intención de modificar la Constitución para hacer constitucional su inconstitucional contrarreforma eléctrica es una muestra de ello.

Todo el contenido de El Comentario del Día en la palma de tu mano. Suscríbete a nuestros canales de difusión: WhatsApp | Telegram

Compartir en:

Twitter
Facebook
LinkedIn
Telegram
WhatsApp
Email

Más Columnas de opinión

PUBLICIDAD

Noticias de interés

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *