El Banco de Inglaterra (BoE) ha decidido mantener su tasa de interés de referencia en 5.25%, marcando este nivel como el más alto desde 2008 y manteniéndolo sin cambios por quinta vez consecutiva, según se anunció este jueves. La decisión fue respaldada por ocho votos a favor de mantener la tasa, mientras que un miembro del Comité de Política Monetaria votó por reducirla en un cuarto de punto, a 5%. Este momento representa un cambio significativo en el ciclo de ajuste de tasas actual, ya que es la primera vez que ninguno de los miembros votó por un aumento, contrastando con la reunión anterior donde dos consejeros apoyaron una elevación a 5.50%.
El BoE señaló que la tasa de inflación ha continuado su tendencia descendente de forma pronunciada, influenciada por los efectos base y la disminución en los precios de la energía y bienes, situándose en 3.4% en febrero desde el 4% de enero. Anticipan que la inflación caiga ligeramente por debajo del objetivo de 2% para el segundo trimestre de 2024, ajustada a la baja en parte debido a la decisión del gobierno de congelar los impuestos sobre el combustible. La institución también advirtió que la política monetaria restrictiva está impactando la actividad económica, conduciendo a un mercado laboral más flexible y poniendo presión sobre la inflación, aunque los indicadores clave de persistencia de inflación se mantienen elevados.
En este contexto, el BoE subraya la importancia de mantener una política monetaria restrictiva el tiempo suficiente para asegurar que la inflación retorne al objetivo del 2% de manera sostenible a mediano plazo, reiterando su disposición a ajustar la política monetaria en respuesta a los datos económicos.
Con información de El Economista | Nota original