En 2023, la inseguridad y la violencia en México costaron a las familias un total de 282,000 millones de pesos, lo que equivale al 1.5% del PIB del país, según datos de la Encuesta de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (Envipe) del Inegi. En promedio, cada persona víctima de un delito desembolsó 6,853 pesos para cubrir las pérdidas derivadas del incidente.
El fraude y el robo fueron los delitos más frecuentes, y el 63% de los costos se destinó a la compensación de pérdidas económicas. Otro 36% se invirtió en medidas de prevención, como cambios de cerraduras y refuerzo de seguridad en los hogares.
El costo promedio por tipo de delito varió considerablemente. Por ejemplo, el robo total de vehículo generó un gasto promedio de 31,481 pesos, mientras que el fraude costó 8,200 pesos. Otros delitos como el robo en transporte público o vía pública resultaron en un costo de 5,670 pesos por víctima.
Además, se destacó que 9 de cada 10 delitos en México no se denuncian, con un 90% de cifra negra. Esto se debe a la falta de confianza en las autoridades y el miedo a represalias.